El Paseo del Bicentenario ya es patrimonio de los tucumanos. Aunque no está terminado (ayer se inauguró solo la primera etapa), los autos ya pueden circular de este a oeste por el flamante túnel de calle Córdoba que une Marco Avellaneda con Suipacha por debajo de las vías del Ferrocarril Belgrano. Hasta ahora, los conductores debían dar un rodeo por Santiago del Estero (seis cuadras) o por 24 de Septiembre (nueve) para llegar a la Suipacha. Yendo por el túnel ganarán al menos cinco minutos.
Los que andan caminando ahorrarán más tiempo cruzando por el puente peatonal, por encima del túnel. “Tardábamos unos 15 minutos en dar toda la vuelta por San Juan. Esta obra es una bendición”, suspira Rita. “Mi marido se fue sin ver esta obra. Hace 40 años ya se hablaba de la necesidad de hacerla”, recuerda emocionada Yolanda, de 88 años, vecina de Suipacha y Córdoba. Ayer se dio el gusto de cruzar con su bastón los 160 metros del túnel. “¡Hace 27 años que esperamos esta obra, desde que nos vinimos a vivir aquí!”, celebran los jubilados Raúl Morán y su señora, Emilia Elías, de Córdoba 1.300.
El primer túnel de Tucumán es una de las obras más esperadas del Bicentenario, junto con la puesta en valor de las peatonales céntricas. El proyecto se completará antes de fin de año con la inauguración del túnel de calle Mendoza, que, como este, ayudará a agilizar y descongestionar el tránsito de las avenidas Mate de Luna y Belgrano-Sarmiento y calles paralelas. La parquización e iluminación de la zona permitirá ganar un nuevo espacio verde.
“Esta era una obra largamente pedida por los vecinos. Este cinturón de acero frenaba la conectividad. Tuvimos una serie de complicaciones, pero creo que hay que rescatar que todo se pudo resolver con ingenieros y personal de Tucumán”, dijo el gobernador, Juan Manzur, tras el corte de cintas. “Es una obra hecha y administrada por la Provincia, que tendrá a su cargo el mantenimiento del lugar. Y también por la Municipalidad que estará a cargo de la semaforización y parquización del paseo y del control del tránsito”, explicó el intendente, Germán Alfaro, que compartió el acto junto con gran cantidad de funcionarios de ambos gabinetes.
Madre e hija, Marisa y Carolina, salieron del brazo a “curiosear” el túnel ilustrado por los artistas María Florencia Ortiz Mayor y Aníbal Fernández. Mariela tampoco se quedó en casa. “Fui una de las vecinas que hace 21 años levanté firmas para que hicieran esta obra”, dice maravillada.
Don Carlos Avellaneda, el gomero de Córdoba y Marco Avellaneda, mira la multitud apoyado en una cubierta de camión. “Desde hace 43 años en esta zona se corta la luz cuando llueve. Pero la obra está muy bien...”, dice. “Va a estar todo bien hasta que vengan las inundaciones, yo por las dudas, no me meto por ahí”, suelta el taxista Julio González. “Hay que poner señalización para que no ocurra lo que pasó con ese turista bajo el puente de la 24 de Septiembre”, recuerda el conductor Raúl Soria. Raúl Díaz todavía cree que el túnel traerá progreso.
El secretario de Gobierno de la Municipalidad, Walter Berarducci, explica que se hizo todo lo necesario para evitar que se inunde el túnel. “Se colocaron cuatro bombas que extraen constantemente el agua de las napas y de la lluvia. Además, el túnel cuenta con un grupo electrógeno por si se corta la energía. Para evitar accidentes, se pondrá señalización electrónica y se está pensando en una barrera automática para prevenir al conductor cuando llueva mucho”. Tucumán no tiene tradición en túneles, por lo que habrá que hacer un trabajo de prevención, cree Berarducci. “Cada nuevo elemento requiere un cambio de hábitos de la población”, sugiere.
La historia
Tres años entre idas y vueltas
La obra comenzó en agosto del 2013. El avance fue lento. Las empresas constructoras (Ingeco, Tensolite y Di Bacco) debían coordinar con el ferrocarril Belgrano para no parar los trenes de carga. El mayor retraso surgió al advertir las altas napas freáticas que inundaban el túnel con cada tormenta. La obra se paró a fines de 2015 y en junio se logró poner un sistema de bombeo. Según los plazos, la obra debía haber terminado en agosto de 2014. Ayer se inauguró la primera etapa.
Los Costos
Varias empresas
Para realizar la obra del túnel de la calle Córdoba se presentaron tres firmas: Ingeco, Tensolite y GAMA. Gracias a una oferta de $ 18,2 millones, la obra fue adjudicada a la primera de las empresas mencionadas. Para el cruce bajo nivel de la calle Mendoza fueron convocadas las empresas Tensolite, Ingeco, GAMA, Sebastián Calleri y Enrique Armengol SRL (participaron sólo las tres primeras). La obra fue encargada a Tensolite, por un valor de $ 18,6 millones. El cruce peatonal fue adjudicado a Di Bacco, con un presupuesto de $ 12,9 millones. Habían participado de la licitación privada, además, las firmas Ingeco y Tensolite, según el acuerdo N° 2.118 de 2013.